Mario se levantó con gripa y, aunque sabe que no puede automedicarse, la obligación de ir a trabajar lo está tentando a recurrir a cualquier remedio. De pronto, la aparente solución a su mal está frente a sus ojos, a través de un comercial de televisión. Allí, en pantalla, aparece un producto que promete acabar en segundos con todos los malestares del resfriado común: Next.
Mario no lo piensa. Inmediatamente sale de casa, pasa por la farmacia de la colonia, toma el producto y, sin receta de por medio, compra lo que supuestamente le quitará el escurrimiento nasal, la fiebre y el dolor de cabeza.
Next, uno de los productos de Genomma Lab, ya acaricia el éxito en ventas gracias al establecimiento de una política pública: la obligatoriedad de presentar una receta médica para los antibióticos que entró en vigor el pasado 25 de agosto y que, colateralmente, sentará las condiciones para incrementar la penetración de los productos milagro, entre los que se encuentra Next.
Miguel Ángel Toscano, titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), coincide en que la medida podría influir en la expansión de los productos milagro, sobre todo porque la publicidad de estos medicamentos se ha encargado de estar presente en la mente de los mexicanos. “El problema –añade– es que no existe un buen reglamento para sancionar la publicidad de los productos milagro, particularmente en televisión, donde se ofrecen soluciones mágicas”.
En el Senado de la República, en tanto, las iniciativas para regular la publicidad de los productos milagro están alojadas en algún anaquel y esperan mejores tiempos para ser desempolvadas. De acuerdo con Ernesto Saro, presidente de la Comisión de Salud de la Casona de Xicoténcatl, en estos momentos los productos milagro tienen un entorno favorable, pues tampoco hay una ley que obligue a venderlos mediante receta médica, ya que no están considerados como medicamentos. Es decir, su mejor gancho es a través de la publicidad en radio y televisión. “Recurren a la trampa porque suelen darse de alta como suplementos alimenticios, vitamínicos o cremas, sin embargo en sus comerciales se atribuyen acciones curativas o terapéuticas que, en la mayoría de los casos, no han sido demostradas científicamente”, acusa el senador.
- Para el que no lo sepa: Genomma Lab es la empresa con mayor número de multas en la violación de los reglamentos publicitarios por la divulgación falsa en sus productos milagro. La última multa impuesta por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y Cofepris a Genomma Lab, en marzo pasado, fue a su champú MaEvans por 2.5 mdp, una cifra que se antoja ridícula luego de que en el primer trimestre de 2010 la compañía reportara una utilidad neta consolidada por 100.6 millones de pesos.
Comentarios